Mientras muchos celebran, hay otros que padecen este fin de año. Aquí sabrá cómo cuidar a ese otro integrante de la familia.
Rancagua, 31 de Diciembre de 2021.- Llega el fin de año y se desatan las celebraciones que marcan el término de un ciclo para el comienzo de uno nuevo. Los chilenos se alistan para recibir el 2022, que estará marcado por el retorno de los espectáculos pirotécnicos, prácticamente ausentes durante la última celebración de Año Nuevo a raíz de la pandemia de Covid-19.
Pero mientras la mayoría disfruta y celebra con estos espectáculos pirotécnicos, son los animales quienes los padecen, pues los fuegos artificiales pueden provocarles serios trastornos y reacciones fisiológicas.
María José Ubilla, subdirectora de la Escuela de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales de la Universidad de O’Higgins y presidenta nacional del Colegio de Médicos Veterinarios, explica los alcances de la pirotecnia, pero también recomienda acciones que todos pueden seguir en sus casas para salvaguardar el bienestar de sus mascotas.
«Los animales domésticos y la fauna silvestre sufre la pirotecnia. Experimentan estrés y miedo. Frente a estos estímulos estresores, pueden aumentar su frecuencia cardíaca, por ejemplo, o mostrar comportamientos alterados: temblando, vocalizando, perdiendo el control de sus esfinteres y/o manifestando conductas de escape», asegura.
«Para prevenir estas manifestaciones se pueden realizar manejos medioambientales que reduzcan los riesgos», explica también la profesional. «Una alternativa es crear una zona segura, disponiendo de algo que asemeje a una cueva y que sea cómodo», afirma. «Para esto se puede usar cajas de cartón, jaulas de transporte o las mismas casas de las mascotas, junto con cojines o mantas, en las que se pueden aplicar feromonas sintéticas de apaciguamiento adecuada para cada especie», puntualiza.
Ubilla también aconseja a los tutores «la realización de ejercicio previo a la exposición a estos estímulos, mediante juegos y paseos, con el objetivo de provocar cansancio en los animales». Por otra parte, destaca, «no se recomienda el uso de tranquilizantes».
Finalmente, la académica insta a las autoridades a seguir buscando «otras alternativas para la celebración de las fiestas de fin de año, que sean respetuosas con la naturaleza. el bienestar humano y el bienestar animal y ambiental».