Presidente de la comisión de Salud indicó que “esta es una situación realmente preocupante. La droga incautada no puede ni ser mal almacenada ni mucho menos no destruida”. Parlamentario adelantó que pedirán, además, un sistema unificado de control e información de las drogas decomisadas y de sus plazos para ser destruida.
Valparaíso, 24 de Noviembre de 2025.- Una petición formal de información solicitó el presidente de la comisión de Salud, senador Iván Flores, a la Contraloría General de la República, a raíz de las falencias que detectó en varios servicios de salud del país en torno a la custodia, almacenaje y destrucción de drogas incautadas en el período comprendido entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2024.
Las irregularidades incluyen diferencias en las cantidades de droga, retrasos en la destrucción y graves problemas en el control de la información. Estos podrían implicar comisión de delitos, por lo que el órgano contralor decidió enviar los antecedentes a la Fiscalía y el Consejo de Defensa del Estado.
Según lo señalado por el senador Iván Flores, “lo que ha informado la Contraloría es gravísimo y por ello necesitamos ahondar en estas 16 auditorías. La droga decomisada se mantiene sin medidas mayores de seguridad, sin tener la infraestructura adecuada y sin tener aparentemente el control y la contabilidad sobre la droga incautada. Entonces, cuando estas cosas empiezan a ocurrir y capaz que haya una explicación razonable y plausible, pero denla, pues denle certeza a la ciudadanía que lo incautado termina destruido de inmediato. Esto sea por armas ilegales o por droga. Aquí tenemos un problema que ningún gobierno ha sabido enfrentar con firmeza y con claridad. En esto no hay jugarretas, ni con la droga ni con las armas se juega. Hay demasiado de eso en la calle”.
Cabe señalar que la Contraloría detectó casos donde se registraba inconsistencia en la cantidad de droga que debía ser destruida. Además, el cruce de datos entre los registros de los Servicios de Salud, Gendarmería y la PDI reveló discrepancias significativas en la cantidad de droga recibida, las cuales «dan cuenta de falencias en la administración de datos, afectando la calidad, integridad, disponibilidad y autenticidad de los mismos». El listado de drogas incluye cocaína, cannabis sativa, metanfetamina, entre otras.
Y es que tal como revelan los informes elaborados por la Contraloría, existe un desorden total en el control de las drogas incautadas. Las fiscalizaciones dieron cuenta de bases de datos defectuosas, donde se detectaron registros en Excel incompletos o con errores de digitación.









