La guerra en Ucrania impacta en el aumento de los precios de los alimentos y de la energía, con lo cual se reducen las perspectivas de crecimiento para la eurozona.
Bruselas, 14 de Julio de 2022.- La Comisión Europea recortó de nuevo sus previsiones de crecimiento para la eurozona para este año y, sobre todo, el siguiente, al tiempo que elevó aun más la inflación media esperada en 2022 y 2023 hasta el 7,6 % y el 4 %, respectivamente.
El impacto de la guerra rusa en Ucrania y el continuado aumento de los precios, especialmente de la energía y los alimentos, siguen pesando en las nuevas proyecciones macroeconómicas que el Ejecutivo comunitario ha desvelado este jueves.
Así, la expansión del PIB que Bruselas espera para este año es ahora del 2,6 %, una décima menos de lo que calculó en mayo, mientras sitúa el crecimiento económico de 2023 en el 1,4 %, nueve décimas inferior a su estimación anterior.
La inflación continúa con su senda creciente y los servicios comunitarios creen que cerrará este año con una media del 7,6 %, frente al 6,1 % de mayo, para después suavizarse hasta el 4 % en 2023, que aun así es 1,3 puntos superior al cálculo de hace dos meses.
UE reduce crecimiento de la eurozona en 2023
En el caso de la Unión Europea, las nuevas proyecciones de la Comisión Europea mantienen un crecimiento económico este año del 2,7 %, pero reducen ocho décimas la estimación para 2023, hasta el 1,5 %.
En relación al aumento de los precios, la CE cree que se situará en el 8,3 % este año y en el 4,6 % el siguiente, frente al 6,8 % y el 3,2 % que calculaba hace dos meses.
A pesar de este escenario, la Comisión Europea cree que todas las economías de la UE se expandirán este año y el siguiente, aunque a un ritmo menor este año y con tasas de crecimiento del PIB que oscilarán entre el 6,5 % de Portugal y el 1,3 % de Suecia.
Así, el en grupo de cabeza se situarán, además de Portugal, Eslovenia (5,4 %), Irlanda (5,2 %), Hungría y Polonia (5,2 %), Malta (4,9 %), España y Grecia (4 %), Letonia y Rumanía (3,9 %), Austria (3,7 %), Croacia (3,4 %), Chipre (3,2 %), Países Bajos y Dinamarca (3 %), Italia (2,9 %) y Bulgaria (2,8 %).
Por su parte, por debajo de la media comunitaria estarían Luxemburgo (2,6 %), Francia (2,4 %), Bélgica y República Checa (2,3 %), Lituania y Eslovaquia (1,9 %), Finlandia (1,8 %), Estonia (1,6 %), Alemania (1,4 %) y Suecia (1,3 %).