A pesar de una férrea oposición especialmente de la bancada de la UDI esta tarde la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa, esta tarde será visada por el Senado.
Valparaíso, 24 de Junio de 2021.- La Cámara de Diputados y Diputadas aprobó por 93 votos a favor, 38 en contra y 6 abstenciones, la iniciativa que permite al Presidente de la República prorrogar hasta el 30 de septiembre la vigencia del estado de catástrofe.
Tras la exposición de los ministros Juan José Ossa, Rodrigo Delgado y Enrique Paris, las diversas ponencias mantuvieron opiniones diversas sobre el tema, cruzando en ello las tendencias políticas respecto de si se estaba a favor o en contra de la medida.
Del Comité Independientes, Fernando Meza pidió mayores aclaraciones al Ejecutivo y que replantee las fases, estimando improcedente que comunas lleguen a estar más de 90 días en cuarentena sin reducción de casos. Sin embargo, Pepe Auth sostuvo que la sola necesidad de mantener las medidas sanitarias vigentes hace necesario aprobar la extensión, aunque llamó al Gobierno a basarse más en el consenso científico para sus determinaciones y no en presiones políticas, así como a adecuar las medidas a las realidades de cada zona.
El diputado RN Sebastián Torrealba señaló que “no es el momento de poner condiciones para aprobar una herramienta como esta” y llamó a respaldar la solicitud del Ejecutivo. Destacó, además, que las y los niños han sido quienes han “sufrido brutalmente” en esta pandemia, pues el colegio y el aula “es lo único que la tecnología no puede reemplazar”. Asimismo, solicitó que se evalúe el toque de queda. “Ya cumplió su rol, por lo tanto, o se flexibiliza o se elimina de frentón”, acotó
Por su parte, Marcos Ilabaca, del PS, fue crítico respecto de la información allegada a la Cámara para justificar la prolongación de un estado constitucional que ha pasado a ser permanente y ya no de excepción, tras más de un año de aplicación. Refutó que haya sido útil para el control de contagios y observó que está llevando a la quiebra a miles de pequeños empresarios, al tiempo que cuestionó que se efectúe un verdadero control fronterizo, dado que la nueva cepa llegó por una pasajera proveniente desde Estados Unidos.
La independiente Érika Olivera dijo que era comprensible que el Gobierno pidiera una prórroga, pero llamó a flexibilizar algunas medidas, por ejemplo, en materia de apertura de gimnasios y centros deportivos, sobre todo considerando la población vacunada.
Andrea Parra, de la bancada del PPD, instó a no engañarse con parciales mejoras en las cifras, ya que se mantiene una alta positividad y la amenaza latente de la “variante Delta”. Dijo que sería un despropósito apurar una total flexibilización, pero pidió mayor fiscalización en las cuarentenas; replantear el tema del toque de queda; y adecuar a la realidad de cada región las medidas del paso a paso. “Exijo un cambio en la gobernanza de la pandemia”, sentenció.
El presidente de la UDI, Javier Macaya, alertó sobre la afectación de la “libertad de la democracia” que genera el estado de excepción constitucional y aseguró que “no es un tema de la UDI con el Gobierno, sino con una facultad que restringe la libertad y que está teniendo un costo muy alto”.
Si bien señaló que se entienden las consideraciones de salud, enfatizó que “este es un virus que llegó para quedarse” Frente a esto, destacó el avance de la campaña de vacunación, asegurando que quienes se han inoculado deben tener mayores libertades de movilización.
Desde uno de los comités mixto, el RD y presidente de la Comisión de Salud, Miguel Crispi, dijo que apoyaría la medida solo para permitirle al Ejecutivo mantener los controles en las fronteras, ya que estimó que las cuarentenas y otras acciones en esa línea podrían ser aplicadas por la vía de una alerta sanitaria. Mientras que el independiente Marcelo Díaz (IND) señaló que hay razones para aprobar la solicitud, pero solicitó poner límites o terminar con el toque de queda; y desvincular del estado de excepción los beneficios sociales.
Por los radicales, José Pérez planteó que es una situación compleja, porque se debe decidir entre mantener restricciones a las libertades y considerar que aún hay un alto número de contagiados y nuevas variantes del virus que complican el escenario. Pidió tener mayor cuidado en los controles fronterizos, replantear medidas como el retorno a clases presenciales y favorecer al pequeño comercio.
Jaime Mulet, de la FRVS, observó la dificultad de dar un nuevo cheque en blanco al Gobierno en algo que ya viene siendo una situación permanente y no excepcional. Dijo que hay un problema de desconfianza por la forma en que se usan los instrumentos y por la aplicación discrecional de algunos beneficios, como fue dejar fuera a los feriantes del denominado “bono alivio”.
Gabriel Boric, del PCS, solicitó no seguir tomando medidas a nivel nacional que no consideren las particularidades de cada territorio. Además, alertó sobre el fin de ciertos beneficios sociales que se encuentran asociados al estado de excepción. “Ponernos contra la espada y la pared es completamente irresponsable”, criticó.
Del PC, la diputada Karol Cariola lamentó que no se diera un poco más de tiempo para poder recoger más antecedentes, sobre todo de los gremios vinculados al manejo de la crisis. Asimismo, refutó que el Gobierno no usara muchas de las herramientas que este estado le entrega, como la utilización de espacios privados para el manejo de la pandemia. En todo caso, remarcó que “no se trata de pasar cuentas políticas, sino de la vida y de la salud de las personas” y que si ahora se le vuelve a entregar al Ejecutivo más herramientas, que estas sean complementadas con mayor fiscalización.